Higiene: higiene vaginal

Tanto la buena higiene personal como la del cliente son importantes. A continuación, puede encontrar algunos consejos.

Higiene vaginal

Una vagina sana contiene tanto bacterias buenas como malas que se equilibran entre sí. Juntos le protegen de virus, bacterias y hongos perjudiciales. Las bacterias buenas producen, entre otras cosas, ácido láctico, que es necesario para una acidez estable. Las bacterias malas se desarrollan cuando se perturba la acidez.

Los factores siguientes pueden perturbar la acidez:

  • Cambios hormonales durante la menstruación, el embarazo y la menopausia. 

CONSEJO: Reemplace el tampón, la esponja o la toalla sanitaria cada cuatro a seis horas. De preferencia no utilice salvaslips si no está menstruando. Esto le hace más propenso a tener una infección vaginal por hongos.
CONSEJO: Durante la menstruación utilice la esponja solamente una vez y evite usarla por más de ocho horas. ¡No utilice esponjas vegetales ni caseras! No son higiénicas. Además, pueden desprender residuos que permanecen en la vagina causando inflamación. Utilice durante las relaciones sexuales más lubricante que de costumbre, ya que una parte es absorbida por la esponja.

  • Ciertos medicamentos pueden alterar los efectos protectores de las bacterias en la vagina (entre otras cosas antibióticos o supositorios ginecológicos).
  • Uso del condón: el látex de un condón puede irritar la mucosa vaginal y de esta manera afectar la flora vaginal.
  • La ropa interior sintética o ajustada.

CONSEJO:  No se ponga prendas ajustadas. Fricción y falta de ventilación dan la carta blanca a las bacterias para multiplicarse. De preferencia utilice ropa interior de algodón en lugar de sintética. No póngase ropa mojada. Humedad fomenta un aumento de bacterias.
CONSEJO: Póngase ropa interior limpia cada día.

  • Presencia de esperma en la vagina puede conllevar un descenso de la acidez.
  • Tabaco
  • Una visita a la piscina o sauna.
  • El dispositivo intrauterino: porque contiene una hormona que alerta la flora vaginal.
  • Estrés y fatiga.
  • Jabón o gel de baño clásico y perfumado.

CONSEJO: De preferencia utilice solamente agua para lavar su vagina externamente.

  • Enjuagues vaginales: el uso de productos íntimos como Iso-Betadine, Dettol, ... solo se recomiendan en caso de infección. Enjuagues preventivos tienen un efecto adverso en el ambiente vaginal y su acidez. Es demasiado agresivo para la flora vaginal. Una vagina sana se limpia sola.
  • Lavarse la zona íntima insuficiente o demasiado.

CONSEJO: Lave su vagina por fuera con agua tibia, no la lave por dentro. No se lave la vagina después de cada cliente.
CONSEJO: ¡De preferencia utilice sus manos para lavarla y evite el uso de manoplas de baño! Estos forman un nido de bacterias.  Si utiliza manoplas de baño, sin embargo, reemplácelos después de cada lavado.
CONSEJO: Cuando se seca, frota de adelante hacia atrás (de la vagina al ano). Séquese con cuidado en lugar de frotarse con fuerza. 

Para los trabajadores sexuales transgénero que hayan experimentado una transición completa se aplican diferentes consejos de higiene vaginal: 

  • Duche su vagina internamente una vez por semana o siga las instrucciones personalizadas. Si no está segura sobre la higiene de su nueva vagina, póngase en contacto con su equipo de asistencia transgénero o con su médico de cabecera.
  • La piel de una neovagina contiene muchas glándulas sebáceas. El sebo puede acumularse en la profundidad de la neovagina y causar quejas. Si es el caso, póngase en contacto con su equipo de asistencia transgénero o con su médico. Si sufre de un fuerte olor vaginal, puede enjuagarse con más frecuencia.
  • No utilice agentes agresivos, solo enjuague con agua.
  • Después de enjuagar, inserte un poco de aceite o, por ejemplo, crema de caléndula en la vagina. Esto evita el ablandamiento y la adherencia de la piel. Aún mejor es una crema hormonal que también fomenta el flujo sanguíneo.
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